Hace casi veinte días que nos dimos la última vuelta por el embalse de Santillana. Ahora que tengo un ratín, aprovecho para contaros lo que aconteció.
Abril siempre es un mes muy interesante. Las parejas de somormujos están desplegando su precioso plumaje y dejando ver su peculiar parada nupcial, algo que no deja indiferente a nadie.
|
Somormujo lavanco (Podiceps cristatus) |
Afortunadamente sigue activa la pequeña colonia de garza real, que lleva en la misma zona varios años. Observamos a los adultos tumbados y alguno en pié. Con paciencia pudimos comprobar que, al menos en uno de los nidos, había pollitos pequeños.
|
Colonia de garza real (Ardea cinerea) |
Los últimos invernantes hacen paradas estratégicas en el embalse, como es el caso de una pareja de ánades rabudos que descubrimos en la orilla opuesta.
|
Ánade rabudo (Anas acuta) |
Todavía quedan bastantes gaviotas, aunque observamos a algunas con claro vuelo dirección norte. También sorprendimos a una preciosa pareja de tarro blanco, también en migración.
|
Pareja de Tarro blanco (Tadorna tadorna) |
Entre las limícolas, los más abundantes fueron los andarríos chico. Un par de archibebe claro se alimentaban en la orilla, y en una zona propicia para reproducirse, una pareja de chorlitejo chico reclamaba y se perseguía continuamente.
|
Chorlitejo chico (Charadrius dubius) |
Para rematar la jornada, un bonito macho de aguilucho cenizo pasó volando dirección norte, para deleite de los presentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario