Nuestro objetivo principal era la observación de aves acuáticas que utilizan este embalse para pasar el invierno.
El embalse estaba rebosante de vida y entre los miles de Ánades reales (Anas platyrhynchos) y Fochas comunes (Fulica atra) se mezclaban grupos también numerosos de Ánades frisos (Anas strepera), Cercetas comunes (Anas crecca) y Cucharas europeos (Anas clypeata).
Entre tanto pato de superficie, pudimos observar también patos buceadores. Concretamente dos parejas de Porrón europeo (Aythya ferina) y al menos una de Porrón moñudo (Aythya fuligula).
Porrón moñudo (Aythya fuligula).En zonas de mayor profundidad, grupillos de Somormujos lavancos (Podiceps cristatus) empleaban su tiempo en zambullirse en busca de alimento y entre ellos distinguimos una silueta algo distinta, pudiéndo compobar que se trataba de un precioso Zampullín cuellinegro (Podiceps nigricollis).
Zampullín cuellinegro (Podiceps nigricollis)Entre tanto, grupos de Gaviotas reidoras (Larus ridibundus) volaban cerca de la superficie, mientras los Cormoranes grandes (Phalacrocorax carbo) secaban su plumaje encima de las rocas, exhibiendo una bonita estampa con sus alas desplegadas al sol.
Las garzas, representadas por varias Garcetas comunes (Egretta garzetta) y Garzas reales (Ardea cinerea), esperaban al acecho su momento.
Garza real (Ardea cinerea)
Aparte de esta buena cantidad de especies acuáticas, disfrutamos de rapaces como Buitres leonados, buitres negros, Ratoneros, un Gavilán y una hembra de Aguilucho pálido (Circus cyaneus) que puso el broche a nuestras jornadas.
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